VIGILANCIA ENCUBIERTA.

VIGILANCIA ENCUBIERTA.

En operaciones de inteligencia se entiende por la palabra vigilancia la observación secreta, o discreta de personas, lugares, instalaciones u objetos a fin de obtener la máxima información posible de forma veraz y detallada. La vigilancia es un proceso sistemático que requiere de paciencia y tiempo que puede ser desde días hasta meses para obtener los resultados deseados. Las vigilancias no son la única forma de obtener información lo ideal es complementarla con otras técnicas investigativas.

Seguimientos son acciones que se ejecutan para controlar los desplazamientos de personas o elementos a fin de descubrir lugares, movimientos o contactos que realice un sujeto. Las máximas a tener en cuenta en operaciones de vigilancia son:
adecuado planeamiento, gran paciencia, máxima discreción, continuidad hasta lograr el objetivo y mucha imaginación e iniciativa para actuar ante imprevistos.

Los agentes encubiertos se deberán considerar objetivo de la vigilancia en el momento de planear su misión pues de ello depende los procedimientos a seguir. Una vigilancia puede tener uno o varios objetivos:

- Obtener pruebas de un delito.

- Obtener información sobre personas u organizaciones a fin de tomar medidas que permitan evitar un delito.

- Localizar a una determinada persona.

- Obtener información sobre las costumbres, lugar de residencia, lugar de trabajo o de ocio de un delincuente o sus cómplices.

- Obtener imágenes fotográficas de la comisión de una falta o delito a fin de aportarlas como pruebas ante la autoridad competente.

- Precisar o desvirtuar información.

- Complementar información obtenida por otra fuente.

- Proteger de manera discreta a una persona o instalación.

- Investigar la naturaleza de las actividades que se desarrollan en un lugar específico identificando a las personas que las realizan y estableciendo la relación que entre ellas se tengan.

- Como medida disuasiva para evitar la comisión de posibles delitos u observar la reacción del sujeto.

- Para demostrar la flagrancia de un delito.